De acuerdo a los delitos que le imputaron, el hombre que intentó matar a su expareja y a sus dos hijos en Rawson puede recibir hasta 50 años de cárcel, la mayor pena temporal posible, es decir, la pena máxima después de la perpetua. Fuentes judiciales confirmaron que la escala penal a la que se expone José Luis Miranda (32) comprende penas de 13 a 50 años de prisión efectiva.

En el mediodía de este miércoles, en la primera audiencia del caso, el fiscal de la UFI Cavig Eduardo Martínez (asistido por el coordinador Roberto Ginsberg) imputó a Miranda el delito de tentativa de homicidio agravado por el vínculo en perjuicio de las tras víctimas y, por el caso de la mujer, también le endilgó el agravante de género (femicidio). Esas figuras se castigan con perpetua, pero como las muertes no se consumaron (se considera en grado de tentativa), la escala pasa a ser de 10 a 15 años de prisión (artículo 44, segundo párrafo - Código Penal).

Ahora bien, Fiscalía también aplicó a la causa el artículo 41 bis del Código Penal, que dice que "cuando alguno de los delitos previstos en este Código se cometiera con violencia o intimidación contra las personas mediante el empleo de un arma de fuego la escala penal prevista para el delito de que se trate se elevará en un tercio en su mínimo y en su máximo, sin que ésta pueda exceder el máximo legal de la especie de pena que corresponda".

De esta manera, el máximo aplicable por cada caso es de 20 años y, como las víctimas son tres, al concursar los delitos la máxima se extiende a 60 años. Sin embargo, en la Justicia explicaron que en estos casos entra en juego el artículo 55, que aclara que "cuando concurrieren varios hechos independientes reprimidos con una misma especie de pena, la pena aplicable al reo tendrá como mínimo, el mínimo mayor y como máximo, la suma aritmética de las penas máximas correspondientes a los diversos hechos. Sin embargo, esta suma no podrá exceder de (50) cincuenta años de reclusión o prisión".

Así, Miranda puede recibir hasta 50 años de cárcel.

"La mayoría de las cosas son inventadas. Por eso necesitan a alguien para cubrir las cosas que han inventado. Arranco desde el principio que lo que nadie sabe...", alcanzó a decir el tirador de Rawson antes de que el defensor oficial César Oro lo interrumpiera para recomendarle que no declarara. Miranda entonces optó por callarse y no seguir con su versión.

FUENTE: DIARIO DE CUYO